A finales de este mes de abril, el gobierno de España, a través del IDAE (Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía) envió a Bruselas el Plan Nacional de Acción de Eficiencia Energética 2017-2020, respondiendo, de esta manera, al requerimiento expresado por la Directiva 2012/27/UE del Parlamento Europeo y del Consejo, del 25 de octubre de 2012, en relación a la eficiencia energética.
Concretamente, la Directiva, en su artículo 24.2, reclama a todos y cada uno de los estados miembros de la Unión Europea la presentación de estos planes de acción energética eficiente. El primero de los planes debió ser presentado por los estados miembros como muy tarde el 30 de abril de 2014. A partir de ahí, se deberán seguir presentando cada tres años.
Este documento, que sigue una línea continuista respecto al Plan Nacional de Acción de Eficiencia Energética del periodo 2014-2020, se posiciona como una herramienta central de la política energética del país, ya que su puesta en marcha está permitiendo lograr las metas de ahorro y eficiencia energética previstas desde la Directiva 2012/27/UE.
Objetivos y medidas
El Plan que ha sido remitido a la Comisión Europea se estructura en cuatro partes diferenciadas:
- Introducción
- Análisis de los consumos e intensidades energética en España hasta 2015 y comparativo con la UE.
- Presentación de objetivos
- Medidas conducentes a la consecución de los objetivos de ahorro energético exigidos por la Directiva 2012/27/UE.
El consumo de energía primaria previsto para el año 2020 se sitúa en 122,6 Mtep, lo que supondría una reducción del 24,7% respecto al escenario tendencial o de referencia.
FUENTE: ESEFICIENCIA
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